Portugués y Rada siguen invictos, entre rojas y reclamos

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Portugués y Rada Tilly igualaron 1- 1 en un partido que incluyó todos los matices. Lo abrió Gonzalo Dachs con complicidad de Tula y en medio de la polémica, lo igualó sobre la hora, Tadeo Sotomayor de penal. Hubo un expulsado por bando y un duelo que no se quebró por el juego.
Gonzalo Dachs fue uno de los mejores.
Conversado, denso y con pocas acciones concretas. El partido de arranque, fue intenso a propuesta del local. Y aunque a veces, lo rápido no equivale a eficaz Portugués se esmeró en que la pelota viaje a mil por hora y mayoritariamente en el campo ajeno.
Rada Tilly mostró alguna incomodidad porque la presión lo obligó a replegarse y a proponer de contra. La visita no logró hacerse de la pelota para construir y el mismo vértigo lo llevó a cometer errores en la salida.
Entre Hoopmann, Sotomayor y Cerdá se construyó un triángulo virtuoso que condicionó el trámite. El envión inicial de Portugués se sostuvo con una dinámica colectiva que funcionó con Guerreiro como ordenador y el resto, involucrado.
Rada siguió maniatado, obligado a confiar en la solidez de Leguiza y Sierra.
La sensación era que el partido estuvo ligado a factores externos, con reclamos constantes de uno y otro bando. En este complejo escenario, la tarea del árbitro Gastón Verón y sus asistentes pareció estar constantemente bajo la lupa.
El puntero intentó resetearse en el complemento. Creció Dachs y en menor medida, Zacarías Suárez y Nahuelquir más los laterales lanzados, quienes se convirtieron en una opción para romper. La mejor estuvo en los pies del local, Sotomayor encaró en medio de los defensores, aunque en el remate final, aparecieron los reflejos de Leblic para salvar a su equipo.
El gol, fuera de contexto, calentó aún más la tarde: un tiro libre de Gonzalo Dachs sorprendió con un pique y terminó escabulléndose entre las manos de Tula.
Al final todo se discutió y se pidió, complicándole la tarea al árbitro Verón, que ya definitivamente cuestionado pitó en el área, una falta de Dachs contra Barría. Tadeo Sotomayor se encargó de la ejecución, sobria y abajo, para empatarlo.
Los dos perdieron piezas por doble amarilla. Primero se fue Nahuelquir en Rada y después Tula por un exceso verbal. El final tuvo de todo, el trámite siguió cortado y ambos intentaron meter pelotas en el área, casi como el manotazo en medio del naufragio.
Los dos estiraron su invicto y del mismo modo, pudieron haberlo ganado. Las expulsiones aportaron más polémica y los reclamos se extendieron al alargue mismo, ahí donde las ocasiones por momentos, llamaron a la desesperación.