La amenaza invisible que perturba GPS, radares y comunicaciones

La NASA lanzó una misión para investigar capas anómalas en la atmósfera que afectan sistemas clave de navegación y defensa.
Científicos de todo el mundo están en alerta por el comportamiento irregular de ciertas capas de la atmósfera terrestre que, desde hace semanas, interfieren en sistemas de radio, radares y GPS. Estas estructuras, conocidas como capas SporadicE, aparecen y desaparecen sin previo aviso, generando interrupciones con posibles consecuencias para la aviación, las telecomunicaciones y la seguridad.
El fenómeno ocurre en la ionósfera, una franja ubicada entre los 90 y 300 kilómetros de altura, donde partículas cargadas eléctricamente pueden alterar señales satelitales. Frente a este escenario, la NASA lanzó la misión SEED (Scintillation and Electron Density Dynamics), con el objetivo de estudiar directamente la composición, densidad y comportamiento de estas capas.
La investigación se lleva a cabo desde el atolón de Kwajalein, en el Pacífico, un punto estratégico cercano a zonas críticas de ionización. La intención es desarrollar un sistema de alerta temprana capaz de anticipar la formación de estas perturbaciones, tal como hoy se monitorean tormentas desde la superficie.
SEED se complementa con otras misiones en curso como GOLD y AWE. GOLD ha detectado patrones inusuales en la ionósfera, incluso sin actividad geomagnética significativa, mientras que AWE analiza desde la Estación Espacial Internacional cómo fenómenos meteorológicos terrestres, como huracanes, influyen en las capas superiores de la atmósfera.
Los expertos creen que resolver el misterio de las SporadicE no solo permitirá mejorar las tecnologías actuales, sino también avanzar en el conocimiento de la relación entre la Tierra y el Sol. En un mundo donde la conectividad es vital, lo que ocurre en los límites del cielo podría impactar directamente nuestras vidas.
Con información de Minuto Uno