La motosierra de Milei pone bajo amenaza los derechos de miles de estudiantes | Charla en el stand del Grupo Octubre en la Feria del Libro

El ajuste del gobierno de la Libertad Avanza sobre la educación pública no solo tiene efectos inmediatos en los decaídos salarios de los docentes y no docentes, en la fuga de cerebros, que ya se está viendo, sino que también tiene consecuencias a largo plazo que hipotecan el futuro del país. Sobre eso se habló en “Contra la motosierra. Universidad pública, ciencia y derechos en jaque”, la charla que se realizó este martes en el stand del Grupo Octubre en la Feria del Libro. No solo se debatió sobre el ajuste sino también sobre lo que viene en el sistema universitario y científico en la Argentina, en un contexto de desprestigio y deslegitimación que promueve el discurso oficial de La Libertad Avanza. Del panel participaron el exministro de Educación Nicolás Trotta, la doctora en Ciencias Sociales Carolina Mera y el secretario de Organización de la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu), Federico Montero.
Trotta alertó respecto a las consecuencias estructurales que provocará el ajuste libertario: “Hay un camino para la insignificancia en términos globales y para la profundización de la desigualdad, la desesperanza y el atraso social en términos nacionales, que es el que está transitando Argentina hoy en día“. Además, el presidente del Consejo Académico de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) y exministro de Educación entre 2019 y 2021 dijo que “si queremos que nuestro país agudice la pobreza y la desigualdad y se siga cayendo del contexto internacional, hay que ver las políticas que despliega el actual Presidente”.
Para Trotta, la gestión de Milei va a contramano del momento histórico que vive el mundo y provoca estragos en la estructura social y económica argentina. “Este Gobierno se abre económicamente en un contexto de guerra comercial y desprotege así nuestro mercado interno, pero además ataca otra herramienta fundamental para nuestro desarrollo, que es el sistema educativo y el de ciencia y tecnología”, alertó el exfuncionario, quien también es fundador de la Escuela Justicialista Néstor Kirchner (EJNK). “Argentina ya ha transitado este camino. Si vemos los últimos 50 años no es la primera, ni la segunda, ni la tercera sino la cuarta vez”, agregó haciendo referencia a la dictadura cívico-militar de 1976, el menemismo y los años de Mauricio Macri.
Además, Trotta auguró que “Milei va a fracasar, pero el tema es cuándo, porque tiene habilidad para encontrar tubos de oxígeno que sostienen este sistema de especulación financiera y que mientras tanto destruyen el entramado productivo y la inversión en educación, en ciencia, en tecnología, en conocimiento”.
Otra de las disertantes del panel fue Carolina Mera, quien reflexionó sobre el fin último que se propone alcanzar el gobierno de La Libertad Avanza. “¿Cuál es su proyecto? Hay una palabra que la tenemos muy presente últimamente, que es la de ‘cientificidio’, pero corremos el riesgo de naturalizarla de tanto usarla. Entonces pensé otra frase: sin ciencia y tecnología no hay futuro, o mejor dicho, no hay el futuro que nosotros queremos para nuestro país”, sostuvo la exdecana de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Mera hizo un repaso acerca de la profundidad que ha tenido el impacto de la motosierra libertaria en esos espacios de investigación. “El desmantelamiento no es solamente del Conicet sino del Inti, Inta, Invap, Arsat o el Banco Nacional de Datos Genéticos. No hay ningún organismo que no haya sufrido el ajuste”, resaltó y agregó que “está la destrucción institucional y el desfinanciamiento, expresado en un ajuste presupuestario de 30 por ciento en 2024 y de 25 por ciento en lo que va de 2025, pero además hay una campaña de desprestigio muy grande contra las universidades y la ciencia”.
En ese sentido, la doctora en Ciencias Sociales se refirió a “la censura y la represión” que sufren por parte del gobierno ultraderechista muchos de los científicos que realizan investigaciones en nuestro país. “Es algo que nos es muy caro a los argentinos y que tenemos que luchar para que no siga extendiéndose. Hay colegas nuestros que por haber escrito libros en dónde criticaban al presidente hoy los están censurando en Conicet, hasta les quieren dar de baja el cargo de investigador ganado por concurso”, denunció. Además, Mera habló de la responsabilidad de los medios de comunicación hegemónicos, “porque no olvidemos que nada de esto se podría hacer si tuviéramos una democracia mediática que denuncie y diga las cosas que están pasando. Hay un silencio total que se vuelve complicidad”. A pesar del oscuro panorama, la académica se mostró confiada en revertir la situación: “De esta vamos a salir porque Argentina ya salió muchas veces, y como siempre, vamos a volver, de eso no hay ninguna duda”.
Del panel también participó Federico Montero, secretario de Organización de Conadu, quien puso de relieve la magnitud del desplome salarial y presupuestario del año pasado. “Si dejamos de lado los años de plomo y las dictaduras, el 2024 ha sido uno de los peores años para la universidad pública y la ciencia de la historia argentina”, sostuvo y recordó que “desde el primer discurso que dio Milei en Davos, cuando hizo una diatriba contra el concepto de justicia social, entre las instituciones que señaló como culpables de la multiplicación y desarrollo de la ideología de la justicia social identificó a las universidades, particularmente las públicas”.
Montero evaluó que Milei fue coherente con su promesa de desfinanciar partidas presupuestarias como la de ciencia y tecnología. “En términos de financiamiento, él prometió motosierra y cumplió”, dijo el dirigente sindical y destacó tres enseñanzas que ha dejado al momento la lucha universitaria. “Primero, la certeza de que a este Gobierno hay que enfrentarlo en las calles. Luego, que hay que tener una representación política que esté a la altura de la pelea social que el pueblo argentino lleva adelante, y finalmente, para derribar un mito que se había instalado, quedó claro que no todos los jóvenes están con Milei”, señaló en relación a la masividad de las dos manifestaciones en defensa de la universidad pública que tuvieron lugar el 23 de abril y el 2 de octubre del año pasado.
Informe: Juan Pablo Pucciarelli