Ferrum, en crisis por el boom de importaciones desde China

Mientras Estados Unidos y China avanzan hacia un acuerdo comercial que permitiría la normalización de las relaciones comerciales entre ambos países, el ingreso masivo de productos de la nación asiática a la Argentina agrava los problemas operativos de empresas de varios sectores locales.
Si bien la indumentaria y el calzado son los más salientes, existen otros mercados donde las importaciones chinas comienzan a condicionar el clima de negocios.
Un caso en este sentido es el de la producción y comercialización de materiales para la industria de la construcción, que ya venía golpeado por el freno de la obra pública y por la recesión del sector privado.
Este contexto afecta tanto a pequeñas y medianas empresas, como a las principales referentes, como el caso de Ferrum que ya a mediados del año pasado había tenido que frenar su producción ante un elevado nivel acumulado de inventario de producto terminado en la planta de Villa Rosa, en el partido bonaerense de Pilar, que estuvo inactiva durante todo julio del 2024, además de haber despido ya alrededor de 100 de sus 800 operarios.
Importaciones de China, un problema para Ferrum
Ahora, sus ejecutivos tomaron la decisión de encarar un plan “de supervivencia”, ya que la crisis no cede y, por el contrario, el ingreso de productos chinos agravó la situación.
En ese contexto, el directorio trabaja con presupuesto financiero, analizando los pronósticos de ingresos en varias oportunidades, teniendo en cuenta que no se observa un repunte en la actividad de la construcción, sector clave para la demanda de sus productos.
El propio Rodolfo Viegener, CEO y dueño de Ferrum, admite que el mayor factor señalado como problemáticos es la importación masiva de China.
En declaraciones al podcast “La Fábrica”, el empresario advirtió que los bajos precios de los materiales asiáticos, que son casi la mitad de los nacionales, complican el escenario de empresas como la suya.
“Si bien se trata de productos importados, carecen de durabilidad y garantía, es lógico que los consumidores opten por ellos debido a su bajo precio”, reconoció.
Para Ferrum se trata de un grave problema teniendo en cuenta que la compañía no tiene chances de igualar esos valores sin afectar la viabilidad de sus negocios.
Mirar el mercado VIP
Por eso, otra parte del plan es la de enfocarse en la producción de artículos de alta gama que ofrecen mayor durabilidad y respaldo, en especial por pertenecer al Grupo FV, que compró Ferrum en 1984, consolidando así un grupo líder en el mercado de productos sanitarios y griferías en Argentina y Latinoamérica, con presencia en 25 países y un portafolio de más de 3.500 productos.
La crisis también se ve reflejada en su último balance correspondiente al primer trimestre de este año, que revela ingresos por ventas de $73.449,4 millones comparados con los $122.873 millones del mismo período del año anterior.
Las cifras muestran una disminución del 40,2% de sus ventas debido principalmente al menor volumen despachado en el mercado local de artefactos sanitarios, bañeras y muebles.
De hecho, su margen de utilidad bruta se redujo de 44,1% a 39% como consecuencia de una mayor incidencia de los costos fijos por la menor producción, aunque con un menor peso de sus gastos de administración y comercialización que fueron de $ 21.571,5 millones, comparado con $ 32.576 millones de igual período del 2024, lo que representa una disminución del 33,8%.
En cuanto al resultado consolidado acumulado, fue de $1.166,1 millones, lo que representa un 1,6% de los ingresos por ventas, comparado con 7,2% del ejercicio anterior, a raíz de la disminución del nivel de actividad del sector de la construcción y la incidencia de los gastos de parada de planta y restructuración del personal que llevól a cabo Ferrum el año pasado.
Es más, la caída de la actividad también afectó el desempeño de Piedra Grande, que es controlada por Ferrum, y que debió paralizar su producción a partir de mediados de julio hasta diciembre inclusive del año pasado.
Balance en rojo
Consecuentemente, el resultado acumulado negativo llegó a los $ 461,1 millones, a pesar de que la empresa sigue trabajando en distintos proyectos que le permitan optimizar los procesos productivos y logísticos y reducir los costos y gastos operativos para adecuarlos a los actuales niveles de actividad.
Con respecto al futuro inmediato, en el reporte enviado por Ferrum a la Comisión Nacional de Valores (CNV), sus ejecutivos se muestran optimistas, más que nada por entender que las medidas tomadas por el gobierno de Javier Milei y la salida parcial del cepo y el inicio de la Fase 3 del programa económico impulsarán la recuperación de la actividad.
Con relación a la construcción, si bien entienden que la tendencia es positiva en los últimos meses, no logran identificar un patrón claro de crecimiento a pesar de haber superado el piso de la recesión.
“En Ferrum seguiremos trabajando en la mejora de los costos de elaboración y la calidad de nuestros productos y en lograr la mayor eficiencia en nuestros procesos productivos, administrativos y logísticos, con el objetivo de brindar al mercado local y regional de una amplia e innovadora gama de productos, en línea con nuestro Plan Estratégico de Sustentabilidad”, anticipa el reporte de la empresa que tiene una historia centenaria que comenzó el 4 de septiembre de 1911 a partir de la fabricación de artefactos sanitarios y griferías.
En este contexto, el Grupo FV nació en 1899 en Alemania, cuando Franz Viegener fundó una empresa en Attendorn dedicada a la fabricación de griferías para la industria cervecera, forjadas en bronce.
En 1921, su hijo fundó FV S.A. en Buenos Aires, que en la actualidad es controlante de las operaciones de Ferrum.