¿qué dijo del régimen de Tierra del Fuego?

La medida entrará en vigencia en las próximas semanas, junto con otras modificaciones regulatorias de distintos sectores de la industria electrónica
14/05/2025 – 13:19hs
El Gobierno avanzó con la eliminación de aranceles a la importación de teléfonos celulares, una medida que impacta de lleno en el régimen de promoción industrial de Tierra del Fuego. La decisión fue oficializada por el Ministerio de Economía y entrará en vigencia en las próximas semanas, acompañada de otras modificaciones regulatorias que alcanzarán a distintos sectores de la industria electrónica.
Desde el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, a cargo de Federico Sturzenegger, respaldaron la iniciativa con argumentos centrados en la eficiencia económica, la generación de empleo a nivel nacional y la necesidad de repensar oportunidades de desarrollo regional.
Federico Sturzenegger y el fin de aranceles: ¿qué dijo del régimen de Tierra del Fuego?
Según explicó el funcionario a través de sus redes sociales, el régimen especial vigente en Tierra del Fuego tenía efectos contraproducentes en términos de empleo, productividad y crecimiento. Sturzenegger estimó que la continuidad de ese sistema fiscal implicaba una pérdida neta de 60.000 puestos de trabajo en todo el país, debido a que el ensamblaje de electrónicos tiene bajo requerimiento de mano de obra, especialmente en comparación con los sectores de servicios.
“El menor costo de la electrónica para 47 millones de argentinos representa dinero extra que podrán gastar en otros bienes y servicios, lo que a su vez generará más empleos que los que se pierden”, argumentó. En ese sentido, planteó que redirigir el consumo hacia productos de mayor valor agregado puede tener un efecto positivo en el conjunto de la economía.
Las declaraciones se dan en medio del malestar generado entre empresas del sector radicadas en Tierra del Fuego, donde ya se registró un paro total en la industria electrónica. Luis Galli, CEO de Newsan, una de las firmas más importantes del rubro, advirtió que con estas nuevas condiciones será difícil continuar fabricando teléfonos en el país. Según afirmó, el régimen no solo apuntaba a sostener empleo local, sino también a desarrollar cadenas de valor a nivel nacional.
Para Sturzenegger, Tierra del Fuego debería posicionarse como destino turístico internacional
Sturzenegger también se refirió a la cuestión de la productividad y respondió directamente a Galli, quien había reconocido que el sector aún no alcanzaba los estándares de eficiencia internacional. Para el ministro, esa brecha difícilmente se cerrará si continúan vigentes los incentivos de protección fiscal. Citó su investigación académica “Endogenous Learning and Trade Policy”, donde sostiene que la existencia prolongada de beneficios impositivos desalienta las mejoras tecnológicas, ya que los empresarios temen que cualquier avance derive en una reducción de la protección estatal. “El resultado es que, por diseño, nunca habrá convergencia”, concluyó.
El régimen de promoción industrial fueguino fue instaurado en los años 70 con el objetivo de fomentar la industrialización del sur argentino. Sin embargo, Sturzenegger cuestionó que esta orientación haya impedido el desarrollo de otras potencialidades económicas de la región. En particular, consideró que Tierra del Fuego podría haberse posicionado como un destino turístico internacional, comparable a lugares como Nueva Zelanda.
“Debería ser un parque de diversiones natural que reciba millones de turistas al año”, expresó el ministro, y criticó que se hayan instalado galpones industriales en zonas de gran valor paisajístico. “Es como si a los norteamericanos se les hubiera ocurrido construir un parque industrial en Yosemite o Yellowstone”, ejemplificó.
La decisión del Ejecutivo generó un fuerte debate entre funcionarios, empresarios y representantes de los trabajadores. Mientras el Gobierno sostiene que la apertura comercial permitirá una mejor asignación de recursos y un impacto positivo en el consumo general, desde el sector industrial advierten que la eliminación de aranceles pone en riesgo miles de empleos y amenaza con desmantelar capacidades productivas instaladas a lo largo de décadas.