Docentes universitarios paran 48 horas y advierten: “Estamos por debajo de la línea de pobreza”

La UNPSJB se suma al paro nacional convocado por las federaciones universitarias en reclamo por la falta de paritarias, el deterioro salarial y la necesidad urgente de una ley de financiamiento para las universidades. La secretaria general de ADU, Gloria Herrera, explicó a Crónica los motivos y objetivos de la medida.
“Cada tres meses perdemos el equivalente a un salario”, alertó Gloria Herrera, secretaria general de ADU.
Los docentes universitarios de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco inician esta semana un paro de 48 horas en línea con la medida nacional acordada por las federaciones CONADU y CONADU Histórica. El objetivo: visibilizar el profundo deterioro de las condiciones laborales y presionar para que se trate en el Congreso una ley que garantice el financiamiento estructural de la educación superior.
“Tuvimos un plenario de secretarios generales el viernes y se resolvió la medida”, confirmó Gloria Herrera, secretaria general de la Asociación de Docentes Universitarios (ADU). Según explicó, el eje central está puesto en el proyecto de ley de financiamiento universitario, actualmente estancado en comisiones de la Cámara de Diputados. “Esperamos que esta semana avance y que se trate en el recinto el 23”, indicó.
Docentes de la UNPSJB se suman al paro nacional con fuerte reclamo salarial y en defensa de la educación pública.
“Los aumentos no superan el dígito”
El malestar docente crece ante la falta total de paritarias en lo que va del año. “La pérdida de poder adquisitivo es cada vez mayor, no hemos tenido ningún tipo de aumento”, alertó Herrera. Según precisó, en los últimos siete meses los incrementos salariales fueron mínimos: entre el 3% y el 6%, con cero por ciento en los dos meses más recientes.
“La ley de financiamiento contempla también aspectos salariales. Solo pedimos que el salario se actualice según los índices del INDEC. Hoy, cada tres meses, perdemos el equivalente a un salario entero”, denunció la dirigente.
Sueldos docentes por debajo de la pobreza
Herrera también advirtió que el cargo testigo —auxiliar de primera equiparado al JTP con dedicación semiexclusiva— ya se ubica por debajo de la línea de pobreza, aún en la Patagonia, donde rige un adicional por zona desfavorable.
“El achatamiento salarial es generalizado. A pesar de que tenemos un adicional por zona, no alcanza para compensar la pérdida. La situación es grave”, subrayó, dejando en claro que el reclamo excede lo estrictamente económico: apunta a la supervivencia del sistema universitario.
Una ley para sostener la universidad pública
La ley de financiamiento universitario busca garantizar que el presupuesto destinado a las casas de estudio alcance el 1% del PBI en 2026 y llegue al 1,5% en 2031. Hoy, ese número está por debajo del 1%, muy lejos de lo que requiere una universidad que cumple funciones de docencia, investigación y extensión.
Ante la posibilidad de un veto presidencial, Herrera fue contundente: “Eso siempre está, pero igual hay que avanzar. Esta ley garantiza no solo salarios y condiciones laborales, sino el derecho de toda la sociedad a acceder a la universidad”.
“Todo lo que sea social y comunitario está en la mira de este gobierno, y dentro de eso está la educación universitaria”, advirtió. La medida de fuerza de esta semana será una muestra más de la defensa activa que llevan adelante los trabajadores de la educación en todo el país.