Trump lanza un perfume que huele a “poder y notas de masculinidad”
La gente votó al presidente Donald Trump, se puso sus zapatos, sus sombreros y sus relojes, y pronto podrá hacer llamadas con su smartphone. Sin embargo, parece que siempre hay algo más que añadir a las formas en que uno puede experimentar todo lo que es Trump. Lo que nos lleva a la última incorporación a la colección de fragancias en constante expansión del comandante en jefe.
El perfume con olor a ¿Trump?
Victory 47 for Men promete “notas ricas y masculinas con un acabado refinado”, aunque no enumera ninguno de sus ingredientes ni su perfil olfativo. Afortunadamente, los primeros comentarios de los usuarios del foro de fragancias Parfumo la describen como “oriental-frutal”, pero la puntúan con solo 1.9 sobre 10.
En cuanto al precio: 249 dólares por 3.3 onzas líquidas, comparable al de pilares de las líneas de lujo más taquilleras, como Tom Ford Noir Extreme (240 dólares por 3 onzas). Sin embargo, el caché entre ambos está probablemente tan distante como la política de Tom y Donald.
Las fragancias pueden parecer una elección extraña para una marca personal que se enorgullece de hablar claro y de los tropos masculinos, pero según los datos del NPD Group, las fragancias de famosos en EE UU ascendieron a 148.5 millones de dólares entre agosto de 2022 y 2023, un aumento del 30% respecto al mismo periodo del año anterior. Y aunque no es exactamente dinero de memecoin, ¿quién no querría un trozo de ese pastel cuando puedes dejar el trabajo sucio a un tercero?
El precio, que no es precisamente de nicho, también sitúa a las fragancias de Trump por delante de la esfera más sofisticada de las fragancias de celebridades. En un extremo, nombres como Jennifer López y Antonio Banderas llevan años abarrotando las estanterías de las tiendas departamentales con sus ofertas dirigidas al mercado más económico. Estrellas como Ariana Grande vienen justo después, captando un enorme mercado con frascos tipo caramelo que cuestan entre 45 y 68 dólares. Luego tenemos a nuestras Rihanna y Billie Eilish, con fragancias que rondan los 140 dólares, un lujo accesible.
No es la primera incursión de Donald en el mundo de las fragancias de famosos. En los nebulosos días previos a su presidencia, allá por 2004, tuvimos Donald Trump The Fragrance, cortesía de Estée Lauder. Le siguieron Success by Trump en 2012 y Empire by Trump en 2015, ambas creadas por la empresa matriz de Parlux, la misma que produce la línea de fragancias de Eilish.
El presidente de Estados Unidos dijo que los próximos dueños de TikTok son “personas muy ricas”, pero será en “dos semanas” cuando anuncie quiénes son.
Los perfumes son una tendencia entre los autoritarios
No es la primera vez que nos preguntamos a qué huele realmente el poder. John F. Kennedy era famoso por usar Eight and Bob y Jockey Club durante su mandato, aunque nunca cedió su nombre ni su “semejanza” a un tercero que fabricara productos que él mismo probablemente jamás compraría. Aun así, el plan de difusión de la marca Trump ha captado la atención de otros autoritarios.
El expresidente brasileño Jair Bolsonaro también tiene su propia línea de fragancias, cortesía de la marca de belleza brasileña Agustín Fernández, aunque su precio de venta al público es claramente inferior: menos de 300 reales, aproximadamente 50 dólares. Al igual que Melania Trump, Michelle Bolsonaro, ex primera dama de Brasil, también se sumó al negocio con el lanzamiento de su línea en 2024. ¿Quizá Donald intercambie botellas de cortesía con Jair? ¿O tal vez haya un frasco raro del Leaders Number One, inspirado en Putin, volando desde Rusia? La mente y la nariz se aturden.
