Recomendaciones para quienes viajen a países con presencia de dengue

La cartera sanitaria recuerda las medidas de prevención y detección temprana de casos de dengue para personas que viajen a lugares con presencia del virus.
Según los últimos reportes regionales, 33 países y territorios han reportado la circulación de serotipos de dengue en las Américas. En este sentido, Brasil, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Panamá reportan la circulación simultánea de DENV-1, DENV-2, DENV-3 y DENV-4.
En el marco de la nueva temporada turística, el Ministerio de Salud de la Nación informó que quienes viajen a estos destinos, deben reforzar las medidas de cuidado para protegerse de las picaduras de mosquitos y evitar contagios. Es importante recordar que el dengue es una enfermedad viral que se transmite cuando un mosquito que se alimentó con sangre de una persona enferma pica a otras personas sanas.
Las medidas de prevención consisten en colocarse repelente de manera frecuente siguiendo las indicaciones del envase, especialmente durante las primeras horas de la mañana y al atardecer, horas en las que el Aedes aegypti tiene mayor actividad.
Asimismo, se recomienda usar ropa clara y holgada en las actividades al aire libre. Este tipo de prendas ayudan a evitar las picaduras, ya que los mosquitos se alejan de los elementos que reflejan la luz del sol.
Las recomendaciones incluyen también colocar espirales (exterior) y tabletas (interior) tomando las precauciones necesarias para evitar intoxicaciones y proteger cunas y cochecitos con tules cuidando que permitan una correcta ventilación.
El dengue y otras arbovirosis, como Zika y chikungunya, suelen tener un período de incubación entre 2 a 7 días, según el caso, y suponen la presencia de fiebre alta (mayor a 38°C) acompañada de uno o más de los siguientes síntomas: dolor de cabeza y/o detrás de los ojos, erupciones o manchas en la piel, dolores musculares y/o articulares, náuseas o vómitos, cansancio intenso y sangrado de nariz o encías.
Si durante el viaje, o en las dos semanas posteriores a su regreso, el viajero presenta al menos dos de estos síntomas, debe realizar la consulta en un centro de salud, informar el destino del viaje realizado y seguir las indicaciones del personal de salud.
A su vez, es fundamental mantener la hidratación y no automedicarse. Debe evitarse especialmente la toma de aspirinas, ibuprofeno, o la aplicación de medicamentos inyectables ya que podrían agravar el cuadro clínico.
El tratamiento oportuno y adecuado disminuye la probabilidad de experimentar formas graves de la enfermedad. Por este motivo, ante la aparición de síntomas compatibles con esta enfermedad, deberán consultar de manera urgente al sistema de salud.
El cambio climático, la alta densidad poblacional en áreas urbanas, las migraciones, el aumento de la frecuencia en los viajes, el incremento de la pobreza y las precarias condiciones de vida constituyen los factores más importantes para el desarrollo y persistencia del dengue, una afección que se extiende a zonas donde antes no estaba y que en la región de las Américas pone en riesgo a unos 500 millones de personas.
Según sostienen los especialistas, en muchos países, en función de los factores involucrados, el dengue podría llegar a convertirse en endémico y, por esto, hacen hincapié en la necesidad de fortalecer la vigilancia epidemiológica además de controlar la sanidad de los ambientes en general y los microambientes de las personas en particular.
Los especialistas coinciden en afirmar que es necesario tener en claro que el dengue no es solamente un problema de una región de la Argentina, sino de todo el país debido a la gran movilidad, la densidad poblacional, el cambio climático y la presencia del vector en casi todo el territorio.
Cabe destacar que, en el marco del Plan Estratégico de Prevención y Control del Dengue, la cartera sanitaria nacional realiza un seguimiento epidemiológico permanente a fin de evaluar la evolución de esta enfermedad en el país. Cada una de las jurisdicciones tiene la responsabilidad del cuidado y control de la transmisión de la enfermedad en sus áreas de competencia.