Ola polar: cómo proteger a perros y gatos ante el frío extremo | Vacunas obligatorias y recomendación de veterianarias

Con la llegada de una intensa ola polar de frío que afecta a gran parte del país, las bajas temperaturas no solo representan un riesgo para las personas, sino también para las mascotas. En este marco, profesionales veterinarias advierten las complicaciones que puede traer el frío a los animales de casa y brindan consejos para protegerlos y mantenerlos seguros, abrigados y saludables.
Vacunas obligatorias y recomendadas para perros y gatos
Según la médica veterinaria, directora de Hoteles Gatos Mishmosos y fundadora de la Academia de Petsitting, Virginia Vallejo, tanto gatos como perros tienen un refuerzo de vacunas anual que ayudan a protegerlos de las enfermedades más graves en esta época de frío intenso.
“Todo el año los perros tienen que tener el refuerzo vacunal anual donde se incluye la vacuna sextuple. Es importante que tengan la protección contra Leptospira, que en general se dan en todas las zonas una vez por año y por otro lado la antirrábica, obligatoria por ley”, afirmó la profesional a Página|12.
Por su parte, la veterianaria Natalia Volonté coincide con Vallejo en que es “recomendable” la vacuna contra la “tos de las perreras”. La inyección, según las especialistas, “ayuda a prevenir una enfermedad provocada por la bacteria Bordetella bronchiseptica”.
En el caso de los gatos, Volonté y Vallejo recomiendan evitar que salgan a la calle y deambulen por los techos, un hábito muy habitual entre quienes tienen patios, jardines o acceso a espacios abiertos.
Cada año, los gatos deben ser vacunados con la Triple Felina, que protege contra el complejo respiratorio felino, la antirrábica – que es obligatoria y la vacuna de la leucemia felina, disponible en todo el país, que Vallejos recomienda para los gatos “outdoor”.
La médica veterinaria Jesica Singermann recomendó la vacuna anual sistémica para la gripe y una “para inmunidad local que se da vía nasal u oral en perros con tendencia a enfermarse más en esta época como los que tienen nariz chata (bulldog frances, bulldog ingles, pug)”.
Cambios de hábitos y especial cuidado a los gerontes
Volonté también advirtió que hay que “tener una mirada más atenta” a perros o gatos “que hayan tenido o están pasando por un proceso de enfermedad respiratoria como el asma, o neumonía”, ya que “habrá una predisposición” más natural a enfermedades de invierno.
En tanto, Vallejo advirtió que en esta época del año hay que prestar atención a los cambios de hábitos en las mascotas, debido a que pueden presentar algún dolor óseo o articular y, cómo empieza el frío y hay más humedad, también pueden manifestarlo.
“Puede ser que dejen de subirse a la cama o un sillón, que suban más lento o duerman más acurrucados. Si bien esto último puede ser por el frío también puede ser una postura antiálgica que esté mostrando algún dolor que pueda llegar a tener en la cadera”, dijo.
Singermann, en la misma línea, indicó que “si el animal está poco activo, tiene menos movimiento, se altera el comportamiento de alguna manera o disminución del apetito, hay que consultar con el veterinario”.
En el caso de las mascotas gerontes -a partir de los 10 años- es particular y las profesionales recomendaron un tratamiento con antioxidantes o condroprotectores preventivos, ya que “no hay que esperar a que aparezca el dolor sino anticiparse, mas que nada porque cuando la enfermedad se presenta estamos complicados porque el tratamiento es paliativo”.
Por último, las tres profesionales coincidieron en que hay que resguardar del clima en interiores con mantas, sacarlos a pasear en horas no muy tempranas o muy tardes –cuando el frío es más intenso- y, sobre todo, tener cuidado con estufas o artefactos generadores de calor artificial, porque perros y gatos suelen pegarse a ellos y podrían quemar su piel o pelos.