Andes suma nuevos aviones y se consolida en el negocio de los vuelos chárter

Andes Líneas Aéreas tiene una historia breve pero intensa. Surgió en 2006 para atender la demanda insatisfecha de vuelos entre Buenos Aires y Salta. En 2020 dejó de volar tras quedar envuelta en una grave crisis financiera. En 2023 ingresó en concurso preventivo de acreedores y reanudó sus operaciones, aunque dedicada exclusivamente a servicios de chárter.
Ahora, la compañía de capitales nacionales realizó una inversión que consolida su reconversión como línea aérea dedicada a vuelos especiales, actividad que le asegura los ingresos que no logró sostener mediante los vuelos comerciales regulares.
Consiste en la incorporación de dos nuevos aviones a su flota, que estarán destinados a reforzar su oferta de asientos para destinos tanto nacionales como internacionales.
En los últimos días recibió el segundo avión Boeing 737-700 y así su flota llega a cuatro aeronaves en la actualidad.
El nuevo avión, matrícula LV-PPM, llegó al aeropuerto de Ezeiza proveniente de Arizona, Estados Unidos, tras una escala técnica realizada en Guayaquil.
Esta máquina se sumó al modelo idéntico con matrícula LV-ARR que había incorporado una semana antes. Así, Andes dispone ahora de una flota de dos aviones Boeing 737-800, con capacidad para 189 pasajeros cada uno, y otros dos Boeing 737-700, un modelo un poco más chico que el anterior ya que cuenta con 147 asientos cada uno.
Andes informó que con estos nuevos aviones reforzará sus rutas nacionales y regionales internacionales consolidando destinos que considera “emblemáticos” como Bariloche, Calafate, Cataratas del Iguazú, Mar del Plata y Córdoba dentro de Argentina. Además de Brasil y el Caribe a nivel internacional.
Los dos B737-700 fueron incorporados mediante el sistema de leasing (alquiler con opción a compra) de la compañía Babcock & Brown Aircraft Management (BBAM). Vienen de ser utilizados por las aerolíneas KLM de Países Bajos y la desaparecida Ecuair, de Ecuador.
Andes busca crecer en los viajes para egresados y equipos de fútbol profesional
Con la incorporación de estos dos aviones la intención de la empresa es aumentar su oferta de vuelos chárter y especiales, operando especialmente destinos turísticos nacionales e internacionales, vuelos estudiantiles y vinculados al deporte.
Una de sus actividades más tradicionales es el traslado de estudiantes en viajes de egresados, que empezó a realizar incluso antes de dejar de volar en 2020 mediante un convenio que tenía con la empresa Travel Rock. La ruptura de ese acuerdo en 2019 fue uno de los detonantes de la crisis financiera de Andes.
Otra pata importante del negocio son los vuelos chárter al Caribe mediante acuerdos con agencias de viajes que venden a sus clientes paquetes con traslado incluido.
Por otro lado, en el aspecto deportivo la base del negocio es el traslado de los equipos argentinos de fútbol que juegan torneos continentales, ya sea la Copa Sudamericana o la Libertadores.
Los nuevos aviones también le permitirán a Andes mantener los servicios de chárter para empresas que necesitan trasladar personal para congresos y convenciones, entre otros eventos corporativos.
Además, otro servicio tiene que ver con dar soporte a otras empresas aéreas, como pasó en su momento con Flybondi, para cubrir demanda adicional que no pueden atender con su flota propia.
La irrupción, a partir de 2017 con la desregulación aérea impulsada por el gobierno de Mauricio Macri, de las líneas aéreas low cost representó un fuerte golpe para Andes, que no pudo hacer frente a una competencia que contaba con espaldas financieras internacionales que le permitían volar a pérdida en algunos destinos.