Un arranque positivo para Colapinto y Alpine | Este sábado será la clasificación para el GP de Emilia-Romagna

Cuando el Rayo McQueen se concentraba con los ojos cerrados, en la previa al bullicio del paddock, y se hablaba a sí mismo para sus adentros, dándose confianza y focalizándose en la carrera, Franco Colapinto tenía apenas dos años. Pero este viernes, casi 20 años después de la aparición del protagonista de Cars, fue el argentino quien cerró los ojos delante de los focos y luces que lo alumbraban en el garage de Alpine, para visualizar, quizás, el circuito de Imola y sus mil variables, o tal vez sólo para concentrarse e imaginar la velocidad, ese ente fascinante al que domar, tal como lo hacía el auto de carreras más famoso del estudio Pixar. Así de concentrado se lo vio a Colapinto en su regreso a la Fórmula 1, este viernes de ensayos en la previa del Gran Premio de Emilia-Romagna, jornada en la que pudo girar sin sobresaltos y en la que recibió el fuerte respaldo del mandamás de la escudería anglofrancesa, Flavio Briatore, quien desmintió que el pilarense sólo tuviera cinco carreras aseguradas por delante.
El argentino giró un número exacto de 50 vueltas entre las dos horas de prácticas libres que ofreció este viernes la Máxima, en las que Colapinto se subió por primera vez al A525 de Alpine y, más allá de hacer algunos ensayos de velocidad, se dedicó principalmente a reconocer y descubrir el monoplaza con el que deberá correr de ahora en adelante. Así lo expresó el propio piloto luego de la jornada de acción en el autódromo Enzo y Dino Ferrari: “Es genial volver a subirme a un auto de Fórmula 1 en un fin de semana de carreras. Todavía queda mucho trabajo por hacer con la puesta a punto, pero empiezo a sentirme más cómodo. Tengo mucho que aprender y a lo que acostumbrarme, pero estoy agarrando ritmo y al final del día empecé a ser un poco más competitivo. El auto se ve bastante fuerte, especialmente con Pierre (Gasly), así que estoy seguro de que estamos en la pelea. La clasificación va a ser complicada con el tráfico; tendremos que estar a la altura desde el principio de la Q1. En general, estoy satisfecho con mi primer día y tengo ganas de que llegue la clasificación”. A su vez, en diálogo con la prensa, agregó: “Hay que seguir progresando y volver más fuertes mañana (por el sábado), pero por ahora estoy adaptándome al auto, al equipo y a los ingenieros. Seguramente vamos a dar otro pasito mañana”.
El primer pasito salió bien, en un día en el que todos los focos estaban puestos en el debut sobre el paddock del argentino que lleva el número 43. Las pruebas siempre son para ensayar, recoger datos entre el equipo y el piloto y poner a punto el auto, pero aún más cuando se trata del comienzo de un período de adaptación, como el que inicia Colapinto con Alpine, en el que además de ajustar y afinar detalles para la clasificación y la carrera, se trata de descubrir en su totalidad los comportamientos del monoplaza y de empezar a desarrollar una comunicación fundamental con su ingeniero para cuando sea hora de clasificar y correr por los puntos. En estos ensayos, el argentino giró primero con el neumático de composición media y luego lo hizo con el blando, el C6, un compuesto que Pirelli ofreció para Imola y que se estrena –será nuevo para todos los pilotos– este fin de semana en Emilia-Romagna.
En la primera práctica, Colapinto registró 1m17s373 como su mejor tiempo, que mejoró en la siguiente tanda de ensayos, marcando 1m16s044. En esa segunda ventana, el argentino quedó 13º (en la primera había sido 17º), delante de Fernando Alonso (Aston Martin), Liam Lawson (Racing Bulls), Gabriel Bortoleto (Kick Sauber), Lance Stroll (Aston Martin), Kimi Antonelli (Mercedes), Nico Hulkenberg (Kick Sauber) y Esteban Ocon (HAAS). Sólo Oliver Bearman (HAAS) e Isack Hadjar (Racing Bulls) fueron los rookies que quedaron por delante de Colapinto en la clasificación de ese segundo ensayo. Pierre Gasly, compañero del argentino, finalizó tercero la tanda que dominaron los McLaren en idénticas posiciones que la primera: el más veloz fue el australiano Oscar Piastri y el segundo más rápido, el británico Lando Norris.
Mientras Colapinto sigue soñando despierto –quizás eso hacía con los ojos cerrados, al interior de su monoplaza de Alpine, antes de empezar a girar– y la escudería Alpine sigue disfrutando de lo que genera el fanatismo argentino en su marketing, sus métricas en redes sociales y el impacto en su estructura, el pilarense recibió este viernes un fuerte respaldo de parte del líder del equipo. Fue Briatore (autoridad que quedó con el máximo poder en Alpine tras la salida de Oliver Oakes) quien le puso sus cariñosas fichas a Colapinto, una vez más. “Franco hará las carreras que tenga que hacer. He leído que tendrá cinco carreras, pero no: no hay límite para sus carreras”, expresó confiado Briatore en diálogo con Sky Sports Italia. Y agregó un pedido personal para el argentino, si quiere continuar como piloto titular de su escudería: “Tiene que ir rápido, no chocar y sumar puntos. Sólo le pido estas tres cosas, no le pido diez. Si las hace bien, pilotará para siempre”.
Esas palabras llegaron al corazón de los argentinos, que siguen encendiendo su ilusión. A lo que dijo el italiano, se le suma lo que hace Colapinto, que este viernes en los ensayos no dejó que lo pasara Lando Norris en una curva que parecía de plena carrera y hasta se animó a probar el DRS para distanciarse de Max Verstappen sobre la pista de Imola (“¿qué hace este tipo?”, se sorprendió el tetracampeón de la maniobra del argentino). Este sábado habrá una prueba más, a las 7.30 de nuestro país (transmite Disney+), y luego, a las 11, será la hora de la clasificación, el primer desafío fuerte para el pilarense, que en medio del bullicio del paddock cierra los ojos, se concentra y visualiza lo que vendrá.