Irán e Israel profundizan su escalada militar con ataques cruzados y víctimas en ambos bandos
La tensión bélica entre Irán e Israel alcanzó un nuevo pico crítico este domingo, con ataques aéreos israelíes sobre infraestructuras clave del programa nuclear iraní y una violenta represalia por parte de Teherán, que lanzó una nueva oleada de misiles contra territorio israelí.
Según informaron las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), los bombardeos de la madrugada apuntaron a objetivos estratégicos en Teherán, incluida la sede del Ministerio de Defensa, instalaciones del proyecto nuclear SPND (Organización de Innovación e Investigación Defensiva) y buques cisterna de combustible. “Nuestra aviación completó una amplia serie de ataques basados en inteligencia precisa”, indicaron las FDI en un comunicado.
Israel justificó la operación al considerar que los objetivos atacados forman parte del desarrollo de un arsenal nuclear iraní que representa una “amenaza existencial” para el país.
Como respuesta, Irán lanzó su sexta oleada de misiles desde el inicio del conflicto, con impactos registrados durante la madrugada del domingo en distintas regiones israelíes. El servicio de emergencias Magen David Adom reportó 93 heridos —cinco de ellos de gravedad— y confirmó la muerte de una mujer de 60 años en la región central del país.
Las zonas más afectadas fueron las tierras bajas de Sefelá, al oeste de Jerusalén, y la región de Dan, donde se encuentra Tel Aviv. En ambas áreas se reportaron incendios e impactos directos sobre edificios.
Desde el viernes, Irán ha intensificado sus bombardeos sobre suelo israelí como represalia por los ataques aéreos que Israel inició la semana pasada. Estos enfrentamientos ya dejaron más de un centenar de muertos en Irán y decenas de víctimas en Israel.
Tanto Tel Aviv como Teherán sostienen que actúan en legítima defensa. Mientras Israel señala que el programa nuclear iraní representa una amenaza inminente, Irán acusa al Estado hebreo de violar su soberanía y escalar el conflicto en la región.
La comunidad internacional observa con creciente preocupación la posibilidad de una regionalización del conflicto, que ya repercute en la estabilidad de Medio Oriente.
Con información de NA
