Qué es el ReArm Europe, el millonario plan del continente para afrontar el distanciamiento con Trump

ReArm Europe es un plan que contempla alrededor de 800,000 millones de euros para reforzar las capacidades militares del continente europeo ante el aumento de las tensiones internacionales y la progresiva retirada estadounidense. La iniciativa de la Comisión Europea se presentó el 4 de marzo en Bruselas, la presidenta Ursula von der Leyen anunció: “Europa no permanecerá indefensa”. Dos días antes de la cumbre extraordinaria de defensa a la que también asistiría el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, se expusieron cinco puntos estratégicos.
“Vivimos en los tiempos más cruciales y peligrosos. La verdadera cuestión que se nos plantea es si Europa está preparada para actuar con la firmeza que exige la situación”, recitó von der Leyen. Su discurso se produjo horas después de que el presidente Trump interrumpiera la ayuda militar estadounidense a Ucrania, una decisión que fue acogida con satisfacción tanto en Moscú como en Budapest, donde el primer ministro Viktor Orban ha expresado opiniones críticas hacia el apoyo a Kiev.
No obstante, el plan se disputa entre los esfuerzos de los ejércitos de los distintos Estados y la creación de una defensa común, que no puede mencionarse explícitamente. La última palabra la tendrán el Consejo y el Parlamento Europeo. Veamos la propuesta más de cerca.
1- Cláusula de salvaguardia del déficit
El primer punto del Rearm Europe es la activación de la cláusula nacional de salvaguardia del Pacto de Estabilidad, el reglamento que rige los presupuestos de los países de la UE. Esta medida permitirá a los Estados miembros aumentar el gasto en defensa incluso por encima del límite de déficit del 3% sin incurrir en el procedimiento de infracción europeo. En la práctica, los gobiernos podrán invertir más en armamento sin temer sanciones de la UE.
2- Millones de euros para sistemas de armamento coordinados
El segundo elemento del plan es un nuevo instrumento financiero de 150,000 millones de euros para inversiones militares compartidas. No serán préstamos a fondo perdido, sino créditos blandos que los países tendrán que liquidar paulatinamente. La particularidad es que estos préstamos solo se concederán para compras coordinadas entre varios Estados miembros, en lugar de permitir que cada Estado compre sus propios sistemas de armamento.
Por una parte, el enfoque permite obtener mejores precios a mayor volumen de compra, y por otra, garantiza que los sistemas militares de los distintos países puedan funcionar juntos en caso de crisis. Para poner en marcha este mecanismo, la Comisión recurrirá al Artículo 122° del Tratado de la UE, que permite la creación de instrumentos financieros de emergencia sin la aprobación del Parlamento Europeo.
3- Flexibilidad en el uso de los fondos de cohesión
El tercer punto introduce la posibilidad de utilizar los fondos de cohesión para proyectos de defensa militar. Estos representan importantes recursos del presupuesto de la UE, tradicionalmente destinados a reducir las desigualdades económicas entre las regiones europeas mediante inversiones en infraestructuras, formación y desarrollo económico. Los Estados miembros podrán destinar parte de los recursos originalmente orientados al desarrollo civil, para adquisiciones y proyectos militares. La Comisión ofrecerá incentivos específicos a los gobiernos que elijan esta opción, reforzando aún más la capacidad de inversión en defensa.
4- Movilización del capital privado
El cuarto punto tiene por objeto la participación del sector financiero privado en el refuerzo de la defensa europea. La Comisión modificará la actual normativa financiera para romper las barreras entre los mercados nacionales y facilitar la inversión transfronteriza en el sector militar. El objetivo es crear un entorno más favorable en el que bancos, fondos de pensiones, compañías de seguros y otros inversionistas puedan financiar a las empresas europeas de equipos de defensa. Cabe señalar que los valores de defensa se han disparado en los últimos días, como el de la empresa italiana Leonardo o la francesa de satélites Eutelsat.
5- Papel del Banco Europeo de Inversiones
Por último, el quinto punto del ReArm Europe prevé la participación del Banco Europeo de Inversiones (BEI) en la financiación de la defensa. A diferencia del Banco Central Europeo (BCE), el BEI es la institución dedicada a los préstamos para proyectos de desarrollo y opera como banco público para inversiones a largo plazo. Actualmente tiene restricciones explícitas en sus estatutos que impiden las inyecciones de capital en el sector militar. El plan propone aligerar estas restricciones, permitiendo al banco apoyar a la industria de defensa con préstamos blandos y garantías.
Artículo originalmente publicado en WIRED Italia. Adaptado por Alondra Flores.