Cobre argentino: potencial geológico vs. limitaciones logísticas

Argentina se posiciona como un actor emergente en la producción de cobre, con proyectos que podrían representar el 21% de la producción sudamericana, según estudios de GEM Mining Consulting. Sin embargo, el desarrollo de esta industria enfrenta limitaciones significativas en infraestructura, lo que reduce su capacidad de respuesta ante fluctuaciones en los precios internacionales del mineral.
Cinco grandes proyectos —El Pachón, Josemaría, Los Azules, MARA y Taca Taca— destacan por su ley media de 0,5%, un 25% superior a la de Chile, el principal productor mundial. No obstante, el informe de GEM señala que, ante un aumento del 41% en el precio del cobre (de USD 3,40 a USD 4,80 por libra), la producción argentina solo crecería un 7,08%. Esta baja elasticidad se atribuye a limitaciones técnicas y logísticas, como plantas de procesamiento con capacidades fijas, falta de mineroductos y redes eléctricas insuficientes.
Infraestructura: el cuello de botella
Manuel Cordero, Practice Leader Planning de GEM, enfatizó que las principales barreras no son geológicas ni regulatorias, sino de infraestructura. “La falta de carreteras y redes eléctricas es crítica. Chile tiene eso resuelto; Argentina orientó históricamente sus inversiones a otros sectores“, señaló. Un estudio de la Secretaría de Minería detalla necesidades urgentes, como la ampliación de rutas nacionales y provinciales, la reactivación de ramales ferroviarios y la construcción de líneas de transmisión eléctrica.
Chile como aliado estratégico
La integración con Chile emerge como una solución viable. Proyectos cercanos a la frontera, como El Pachón y Josemaría, podrían beneficiarse de la infraestructura chilena, que incluye puertos, plantas desaladoras y mineroductos operativos. El Tratado Binacional Minero de 1999, vigente, pero subutilizado, ofrece un marco legal para esta colaboración, aunque requiere mayor impulso político. En agosto de 2024, representantes de ambos países destacaron su potencial durante un encuentro binacional.
La dialéctica entre perspectiva internacional y realidad tangible
En un reciente debate organizado por Ámbito, expertos de Turquía, Estados Unidos, Canadá y Australia coincidieron en el potencial de la minería argentina. Ozgur Demir (Cámara Argentina-Turquía) destacó oportunidades comerciales: “Veo un escenario positivo. Si sigue por este camino, creo que se fortalecerá la relación entre Argentina y Turquía. Allá hay una población que busca nuevos recursos y energía, y esta región es aún muy virgen. Hay una gran oportunidad; es necesario firmar acuerdos bilaterales para facilitar el comercio”.
Marina Senestro (Cámara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina), señaló: “Me parece que la oportunidad es enorme, especialmente en sectores estratégicos como el minero, y claramente estaremos trabajando en pos del desarrollo de más negocios”, y Alberto Carlocchia (Cámara Argentina-Canadá) avanzó en la misma línea, subrayando la importancia de fortalecer acuerdos bilaterales: “En este sector, en particular, hay una relación histórica que beneficia a ambos países. No solo por la inversión que recibimos de Canadá, sino también por el intercambio en sectores clave, como el acuerdo de colaboración en minerales críticos”.
Norma Ramiro (Cámara de Asia) resaltó el rol clave de Asia-Pacífico como destino de exportaciones: “Los acuerdos bilaterales son fundamentales. Veo también un progreso en las relaciones entre instituciones académicas. Visualizo un mayor comercio y relaciones más sólidas con una región clave para las importaciones y exportaciones, como Asia-Pacífico”.
Potencial industrial: una discusión cada vez más cerca
Argentina tiene los recursos geológicos para ser potencia cuprífera, pero definitivamente debe resolver su ecuación infraestructural y logística (si se quiere aprovechar la oportunidad que ofrece el mercado). La cooperación regional y las alianzas estratégicas internacionales serán determinantes en esta carrera contra el reloj, donde países como Perú y Zambia también compiten y pujan por atraer inversiones mineras globales.
Con avances mineros en Jujuy con la explotación del yacimiento Martín Bronce (actualmente único exportador del mineral, expulsa 5 Tn mensuales) y su proyección para los próximos años, sumado a los avances mendocinos sobre una posible transformación productiva con proyectos como San Jorge, en Uspallata (frenado por restricciones derivadas de la Ley 7722 y la resistencia ambiental), y el reciente descubrimiento en del Distrito Vicuña en San Juan, que alberga los proyectos Josemaría y Filo del Sol (con reservas estimadas en 13 millones de toneladas de cobre, además de cantidades significativas de oro y plata), la capacidad argentina para copar el mercado es indiscutible.
Tampoco se puede ignorar el potencial chubutense con su yacimiento de oro y cobre “Sacanana 2” en la meseta central. Queda ver que acciones serán llevadas a cabo en el mediano y largo plazo frente a la exigencia global, no solo a nivel nacional, sino dentro de las mismas provincias. La ansiada diversificación industrial del país depende de decisiones políticas que afectarán, indiscutiblemente, el futuro económico de todo el país.
Redactado en base a información del periodista Sergio Serrichio para el medio Infobae y Carla Barbuto para el medio Más Energía.