Declaró el director de la clínica donde se operó Maradona y ordenaron allanarla | El juicio por la muerte del Diez

Este martes, en la décimoquinta audiencia del juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, declaró frente al Tribunal Oral en lo Criminal Nº3 Pablo Dimitroff, el médico y director de la Clínica Olivos donde el ex futbolista fue operado de un hematoma subdural en la cabeza, casi un mes antes de fallecer.
El de Dimitroff es un testimonio clave para la Fiscalía y para la querella porque, como se presumía, dio información sobre los días de internación del ídolo luego de la intervención quirúrgica, y sobre la decisión de externarlo para continuar su recuperación en el barrio privado de San Andrés, en Tigre. El médico habló desde el momento en que Diego se acercó a la clínica para la operación hasta que se fue, y responsabilizó al neurocirujano Leopoldo Luque y a la psiquiatra Agustina Cosachov de decidir, a pesar de su advertencia, que Maradona sea trasladado para una internación domiciliaria.
Dimitroff también cuestionó a Luque y Cosachov por el constante pedido de sedación a Maradona frente a la abstinencia de alcohol que transitaba durante la internación. “Luque y Cosachov nos pedían que hiciéramos algo para que el paciente estuviera tranquilo y se limitaban a decir ‘por favor, sédenlo, hagan algo para que no esté así’”, comentó el director de la clínica, que reflexionó: “Había que sedarlo, pero una cosa es sedarlo como parte de una etapa que tiene un seguimiento y otra es sedarlo y que después no haya nada”. El Jefe de terapia intensiva de la Clínica Olivos, Fernando Villarejo, sostuvo que “en total desacuerdo” lo sedó por un día, luego de las presiones de Luque y Cosachov.
Dimitroff también señaló que los mismos responsables del equipo médico le habían asegurado que “el manejo del paciente en el domicilio en el que estaba era muy difícil”. Sin embargo, los acusados decidieron continuar la recuperación con una internación domiciliaria.
La decisión de externarlo
“Para nosotros, que el paciente se fuera a la casa no era una opción válida ni adecuada en ningún momento. Que el paciente estuviera sin control en un domicilio para mi era gran parte del problema”, lamentó Dimitroff. Aseguró que antes de retirarlo del hospital “tenía que modificarse esta situación por la que estaba internado, que tenía que ver con que su conducta era autolesiva”.
El médico describió algunas complicaciones del Diez que debían corregirse antes de volver a un domicilio particular: “no comía correctamente, tomaba cosas que no le hacía bien, no cumplía con la toma de medicación, no se levantaba de la cama, tenía alterados los ciclos de ciclovigilia porque estaba despierto de noche y dormía de día”.
Por ello Dimitroff resumió que “la única carta adecuada para continuar el tratamiento” era ser trasladado a un centro de rehabilitación, para mejorar su motricidad, limitar o erradicar sus consumos problemáticos y contener sus reacciones. El director de la Clínica Olivos rechazaba la externación ya que “no era lo que médicamente necesitaba”. De todas formas admitió que “nuestra posición era que nosotros no podíamos seguir sosteniendo una internación clínica cuando el paciente nos dejaba en claro que se quería ir“.
Contradicciones y allanamiento
Pablo Rufino, el neurocirujano que operó a Maradona del hematoma subdural en la cabeza (a pesar de que Leopoldo Luque se autoadjudicó esa intervención frente a los familiares de Diego) también declaró este martes frente a los jueces Maximiliano Savarino, Verónica Di Tomasso y Julieta Makintach.
Mientras que Dimitroff había asegurado que los exámenes prequirúrgicos se habían realizado en la Clínica Ipensa de La Plata, donde le detectaron el hematoma al Diez, el neurocirujano dijo que sí le hicieron los exámenes pertinentes en la Clínica Olivos, pero que no fueron ingresados en su historia clínica. Debido a la contradicción entre ambos declarantes el fiscal Patricio Ferrari, acompañado por la querella y la defensa, solicitó el “inmediato allanamiento” de la Clínica Olivos.
El objetivo del allanamiento será encontrar y revisar todos los registros informáticos y de papel que hayan sido realizados del 3 al 11 de noviembre de 2020 porque podría haberse obviado una parte del expediente médico que sería material de pruebas. Se cree que podría haber pruebas que involucran a los imputados y que podrían ser aportar a la causa. El allanamiento comenzó a las 19 horas de este martes y durará 24 horas. Además, la fiscalía pidió un careo entre Rufino y Dimitroff, lo que aún no fue respondido por los jueces. Sin embargo Fernando Villarejo, el jefe de terapia intensiva, respaldó la versión de Dimitroff de que no se hicieron los exámenes previos allí.
La causa
La muerte de Maradona, investigada bajo la carátula de homicidio simple con dolo eventual, tiene como acusados a Leopoldo Luque, Agustina Cosachov, el psicoanalista Carlos Díaz, la coordinadora de Swiss Medical Nancy Forlini, el médico Pedro Di Spagna, el coordinador de enfermeros Mariano Perroni y el enfermero Ricardo Almirón.
La otra acusada es la enfermera Dahiana Gisela Madrid, señalada con los mismos cargos, quien había solicitado un juicio por jurado y tendrá un proceso judicial aparte de los otros sospechosos que se iniciará en la segunda parte de este 2025. En caso de ser hallados culpables, todos los imputados podrían recibir entre 8 y 25 años de prisión según lo establece el Código Penal.
Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020 a causa de un edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica.