Bullrichismo al palo, la estrategia de Zdero para frenar a Capitanich | Chaco elije este domingo diputados provinciales

Desde Resistencia
En otoño, donde las hojas de los árboles caen y las flores se marchitan, hay algo que en Resistencia florece como nunca: la propaganda oficial. Enormes carteles de etéreo fondo blanco, con vivos detalles en rosa y azul, letras gordas y fotos imponentes. Algunos muestran al gobernador Leandro Zdero; otros enumeran supuestos logros de gestión, como inversión en salud o aumentos salariales a docentes. Pero el mensaje que se repite como un mantra es uno solo: “Orden”.
Entre toda la cartelería hay uno que destaca especialmente. No muestra al gobernador, sino a un joven anónimo, con el rostro semicubierto y una gomera tensa en sus manos, a punto de disparar. Lo acompaña una frase: “Un año sin piquetes”, con el logo del Gobierno del Chaco en una esquina. Es el cartel más grande, más repetido y más visible.
La pieza forma parte de una apabullante campaña publicitaria lanzada por el oficialismo chaqueño a comienzos de año y que se mantiene de cara a las elecciones legislativas de este domingo. El operativo no sólo incluye cartelería callejera, sino también una fuerte presencia en redes sociales, plataformas digitales y medios tradicionales. Una multimillonaria puesta en escena que busca reforzar el discurso de “orden” y “fin de los piquetes”, instalando una contracara simbólica: el “caos” y la “corrupción”, encarnados en la figura del exgobernador Jorge Capitanich, principal rival en esta elección.
El radical Zdero, que asumió en 2023 tras derrotar al propio Capitanich, lidera la campaña del oficialismo pese a que el primer candidato de su espacio es Julio Ferro, un abogado de 40 años, actual subsecretario de Legal y Técnica de la Provincia, poco conocido para el electorado. La estrategia oficial es mostrar “caras nuevas”.
Capitanich, por su parte, encabeza la lista del reflotado frente “Chaco Merece Más”, con el que ganó por primera vez la gobernación en 2007. Desde el radicalismo aseguran que su candidatura será testimonial y que Capitanich volverá a competir por una banca en el Senado en octubre. Desde el peronismo, lo niegan.
El exgobernador vuelve al ruedo con un discurso mucho más agresivo que el habitual. Entre una larga lista de cuestionamientos, acusa al gobierno de Zdero de llevar adelante tarifazos en luz y transporte, de planchar las paritarias estatales y de un gasto excesivo en propaganda.
Más de un millón
Un millón de chaqueños y chaqueñas están habilitados para votar. No hay PASO este año, ya que la Legislatura las suspendió. En esta ocasión, se renovarán 16 de las 32 bancas legislativas. Se espera que el pronóstico de cielo despejado facilite la participación del electorado, ante un clima de apatía generalizada.
Chaco Puede + La Libertad Avanza (alianza oficialista), Frente Chaco Merece Más, Primero Chaco, Partido del Obrero, Proyecto Sur, Lealtad Popular, Participación Ciudadana, Frente Arraigo, Ahora Vos Chaco, Bases para la Libertad y el Nuevo Espacio Chaco Independiente, competirán este domingo.
Hoy, el oficialismo tiene 15 diputados, pero no alcanza el quórum propio. En esta ocasión, pone en juego siete bancas y apuestan a obtener al menos nueve. El pacto del radicalismo chaqueño con La Libertad Avanza, sellado en marzo, fue una bisagra. Bajo el nombre “Chaco Puede” -frase utilizada como propaganda por la última dictadura en la provincia-, la coalición oficialista dejó afuera al PRO y acordó ceder los lugares tres y seis de la lista para los candidatos libertarios. Poco después de este acuerdo, el presidente, Javier Milei, giró un anticipo de $120 mil millones al Chaco, con facilidades para su devolución.
Del lado opositor, el “panperonismo” también pone en juego siete bancas. Los dos escaños restantes pertenecen a monobloques. Como en 2023, el justicialismo va a las elecciones dividido. Capitanich no logró sumar a su armado a la intendenta de Barranqueras, Magda Ayala ni al diputado provincial y exintendente de Villa Berthet, Atlanto Honcheruk, quienes competirán con lista propia bajo el sello “Primero Chaco”.
“Nuestros candidatos no necesitan esconderse en la Legislatura en busca de fueros”, acusó Zdero en la previa al cierre de campaña. “Todo es un desastre en esta gestión provincial. Nosotros defendemos las ideas de la libertad, no ellos que son autócratas”, arengó Capitanich, horas antes del inicio de la veda.
Política Judicial
En la Justicia también se libra la batalla electoral. La detención de líderes piqueteros por presuntos hechos de corrupción vinculados al mal uso de bienes y fondos públicos transferidos durante el gobierno de Capitanich, como el caso de Ramón “Tito” López o de su presunto testaferro, Adrián Ayala, sumado al inminente juicio oral contra el dirigente social, Emerenciano Sena, por el femicidio de su nuera Cecilia Strzyzowski, forman parte del kit utilizado por el oficialismo para atacar al exgobernador, presentándolo como “socio”.
Esta asociación fue llevada al extremo, al punto tal que en redes sociales y plataformas digitales comenzó un bombardeo de placas noticiosas con títulos tergiversados, muchas de ellas de medios que ni siquiera existen. Chaco Merece Más realizó una presentación ante el Tribunal Electoral del Chaco para que le ponga un freno a la campaña sucia, pero la denuncia fue desestimada bajo el argumento de la libertad de expresión.
Desocupación y pobreza
Esta contienda electoral se da en el marco de indicadores sociales graves. Según el último informe del INDEC, el Gran Resistencia tuvo la segunda tasa de desocupación más alta del país (8,4%). La mortalidad infantil también creció: pasó de 9,1 por mil nacidos vivos en 2023 a 11,4 en 2024.
Pese a una baja reciente en los índices de pobreza e indigencia, el Gran Resistencia sigue encabezando ambos rankings a nivel nacional: seis de cada diez habitantes son pobres y al 22% no le alcanza para comprar alimentos básicos.
En zonas como El Impenetrable, donde el Indec no llega, la situación es aún peor. Es por eso que, en marzo, la Justicia ordenó reforzar asistencia alimentaria y de agua a las familias indígenas del Departamento General Güemes. En una muy cuestionable decisión, el gobierno apeló y señaló que la medida judicial persigue una finalidad “efectista, mediática y/o publicitaria”.