Estudio identifica 12 amenazas que podrían acelerar la extinción de las abejas

Más del 40% de las especies de abejas se encuentran en riesgo de extinción. Así lo ha advertido en diversas ocasiones el Centro para la Biodiversidad Biológica de Estados Unidos. Esta situación no solo compromete la supervivencia de estos insectos, sino que también amenaza la estabilidad de múltiples ecosistemas y la producción de alimentos esenciales para la humanidad.
Se calcula que cerca del 90% de las plantas con flores, así como más de tres cuartas partes de los cultivos fundamentales a nivel global, dependen de los polinizadores. Sin embargo, sus poblaciones han disminuido de forma alarmante en las últimas décadas, fenómeno que ha sido especialmente grave en las comunidades de abejas.
Un estudio de la Universidad Estatal de Washington (WSU) estimó que, tan solo en Estados Unidos, las colonias comerciales de abejas melíferas —las más comunes a nivel mundial— podrían registrar este año una pérdida histórica de entre el 60 y 70%. Estas cifras superan ampliamente las de la última década, en la que las tasas de disminución oscilaban entre el 40 y 50%.
La comunidad científica advierte que el peligro es aún mayor para las especies silvestres, debido a los impactos que diversas actividades humanas generan en sus hábitats naturales. Una investigación publicada en la revista One Earth, en 2021, reveló que, entre 2006 y 2015, se documentó una reducción aproximada del 25% en el número de especies de abejas a nivel mundial en comparación con los registros de la década de los noventa.
Los especialistas coinciden en que identificar con precisión las causas de esta crisis es fundamental para implementar medidas de prevención y respuesta ante la rápida desaparición de estos polinizadores a nivel mundial.
Factores emergentes que amenazan la supervivencia de las abejas
Con este propósito fue elaborado el informe Bee:wild, parte de una campaña científica global enfocada en la protección de los polinizadores. La iniciativa, liderada por la Universidad de Reading, en Reino Unido, identifica las 12 amenazas emergentes más relevantes que podrían intensificar su declive en los próximos cinco a 15 años. Asimismo, detalla estrategias concretas para su preservación y recuperación.
El documento reafirma hallazgos previos como:
- La creciente demanda de minería metálica.
- La combinación de pesticidas utilizados en la agricultura.
- La falta de monitoreo regional de agrotóxicos.
- La contaminación lumínica.
- Contaminación por metales pesados (mercurio, cadmio).
- Incendios forestales.
Todos estos elementos deterioran el entorno natural de los polinizadores, alteran sus patrones de comportamiento y disminuyen su capacidad de reproducción y supervivencia.
Además, el reporte incorpora nuevos riesgos identificados recientemente, los cuales requieren mayor investigación por su potencial impacto en las abejas y otros polinizadores:
- Simplificación de cultivos como consecuencia de conflictos armados.
- Presencia de microplásticos en el medio ambiente.
- Reforestación mal planificada orientada a alcanzar emisiones netas cero.
- Contaminación por antibióticos.
- Polución atmosférica.
- Expansión de la agricultura en entornos controlados.